San Pedro Basilica

Verdades Bíblicas para los Católicos Romanos (Parte 1)

Por Bartholomew F. Brewer, Ph. D. – Ex-sacerdote católico

Si usted es católico y le gustaría saber lo que dice su Biblia católica acerca de creencias fundamentales del catolicismo romano, entonces considere el contenido de este artículo. El propósito de este texto no es discutir acerca de las creencias, ni de demoler una religión en particular. El autor más bien presenta a los católicos, en un espíritu de amor, aquello que en realidad es erróneo y lo que es verdad, según las Escrituras. Este artículo ha sido escrito por un ex-sacerdote católico que realmente conoce de primera mano las cosas de las que está hablando.

LA VERDADERA IGLESIA

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Jesús se refirió a la declaración de Pedro «Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo» en Mateo 16:16 para edificar Su iglesia.

La iglesia católica romana está construida bajo la premisa de que Jesús, en Mateo 16:13-19, hubiera nombrado a Pedro como el primer papa, para entonces fundar Su iglesia y establecer el papado. Si esta hipótesis fuera cierta, entonces todos los cristianos deberían convertirse al catolicismo. Si es falsa, entonces toda la religión católica es falsa y es una secta; por tanto, ningún verdadero cristiano sería capaz de identificarse con semejante sistema. Nosotros debemos, por tanto, examinar las Escrituras para saber cuál es la verdad. Las Escrituras no son simplemente escritos hechos por hombres. «Porque la profecía nunca estuvo bajo el control de la voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron bajo el control del Espíritu Santo» (2 Pedro 1:21 RVC). «Toda Escritura está inspirada por Dios y es útil para enseñar y reprender, para corregir y educar en una vida de rectitud, para que el hombre de Dios esté capacitado y completamente preparado para hacer toda clase de bien» (2 Timoteo 3:16-17 DHH). «El cielo y la tierra desaparecerán, pero Mis palabras [la Biblia] no desaparecerán jamás» (Mateo 24:35 NTV). La Biblia y la historia, ambas dan testimonio de la autenticidad, de la credibilidad, de la eficiencia y de la suficiencia de la Biblia.

Cuando Jesús dijo en Mateo 16:18 (NTV): «Y Yo te digo que tú eres Pedro [Petros], y sobre esta roca [petra] edificaré Mi iglesia, y las puertas del Hades no podrán vencerla«. Jesús usó el demostrativo «esta» para describir la confesión de Pedro -«Tú eres el Cristo, el Hijo de Dios vivo» (la roca es esta afirmación). Jesús dijo: «Tú eres Pedro» (Petros, una piedra – todos los creyentes son piedras; véase también 1 Pedro 2:5 y Efesios 2:21) «Y sobre esta roca (petra, una enorme roca de fundación – la confesión de que Jesús es el Cristo) edificaré Mi iglesia«. Jesús no prometió que edificaría Su congregación sobre Pedro, ya que Él no hubiera confiado a Su preciosa posesión, tal como lo es Su asamblea bajo la dirección de un hombre falible, y mucho menos una sucesión de tales hombres.

El Papa de Roma es llamado el Vicario del Hijo de Dios (Vicarius Filii Dei). En la Biblia leemos que el Espíritu Santo, y no un Papa, fue enviado para tomar el lugar de Jesús en la tierra. Este es el verdadero significado del término vicario. De hecho, el Espíritu Santo vino por nosotros, para guiarnos hacia toda la verdad (Juan 16:7-15), y las Escrituras han sido dadas para enseñar, para convencer, para corregir y para instruir (2 Timoteo 3:16). Cristo no ha abandonado Su congregación a la dirección humana. Jesús mismo ha sido siempre la Cabeza de Su asamblea. Él nos habla a través de Su Palabra infalible: las Sagradas Escrituras, y a través de Su Espíritu Santo siempre presente e infalible. Recuerde que Cristo es la Roca y Cabeza única de la Asamblea.

«Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo.»—1 Corintios 3:11 (RVC)

La Roca era Cristo:

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En Éxodo 17 Dios instruye a Moisés para que al golpear la roca saliera agua, de ella bebió el pueblo de Israel. Esa Roca era una representación de Cristo.

«Y todos bebieron la misma agua espiritual. Pues bebieron de la roca espiritual que viajaba con ellos, y esa roca era Cristo.»— 1 Corintios 10:4 (NTV)

Cristo es la Cabeza de toda la Asamblea:

«Dios ha puesto todo bajo la autoridad de Cristo, a quien hizo Cabeza de todas las cosas para beneficio de la iglesia. Y la iglesia es el cuerpo de Cristo; Él la completa y la llena, y también es quien da plenitud a todas las cosas en todas partes con Su presencia.» — Efesios 1:22-23 (NTV)

Jesucristo es la piedra angular:

«Y están edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, cuya principal piedra angular es Jesucristo mismo.» — Efesios 2:20 (RVC)

Dios es llamado una Roca o la Roca de Israel unas 34 veces en el Antiguo Testamento. Verá usted, la Biblia enseña claramente que desde el momento de la fundación de Su asamblea, Jesús iba a ser la única Cabeza, siendo el Espíritu Santo el Vicario y el Guía, y la Biblia siendo la única autoridad en materia de fe y de práctica. Todos los verdaderos cristianos constituyen LA VERDADERA ASAMBLEA (son aquellos en quienes el Espíritu Santo habita, y quienes creen y obedecen las enseñanzas de Cristo). Los verdaderos creyentes eran llamados «cristianos», no «católicos».

Los discípulos fueron llamados cristianos por primera vez en Antioquía:

«Durante todo un año se congregaron con la iglesia y enseñaron a mucha gente. Y fue allí en Antioquía en donde a los discípulos de Jesús se les llamó cristianos por primera vez.» — Hechos 11:26 (RVC)

Agripa le dijo al apóstol Pablo:

«Un poco más y me convences a hacerme cristiano —le dijo Agripa.» — Hechos 26:28 (NVI)

Sufrir por ser cristiano:

«Pero si alguien sufre por ser cristiano, que no se avergüence, sino que alabe a Dios por llevar el nombre de Cristo.»— 1 Pedro 4:16 (NVI)

No existía ningún católico antes de que el cristianismo se fusionara con el paganismo y se convirtiera en una religión de estado romano hacia el año 315 d.C. Los verdaderos cristianos han obedecido la Palabra de Dios: Nunca se han asociado con la corrupción del paganismo. Las puertas de la muerte nunca han prevalecido en contra de los verdaderos creyentes. Estos son unos pocos, y su camino es estrecho; ellos hubieran preferido sufrir el martirio en lugar de arriesgar la Palabra de Dios o negar a Su Señor y Salvador Jesucristo.

«Oí otra voz del cielo, que decía: «Salgan de esa ciudad, ustedes que son Mi pueblo, para que no participen en sus pecados ni los alcancen sus calamidades» — Apocalipsis 18:4 (DHH)

Los creyentes no deben identificarse con iglesias falsas o que comprometen sus creencias [sincretismo].

El Papa

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El Papa León XIII

El Papa es llamado «Nuestro Santo Padre» (vea la carta encíclica del Papa León XIII en la traducción Douay de la Biblia). El también es llamado «Nuestro Santísimo Señor» a partir del Papa Pío X (vea el juramento de los cardenales). Mauro, un conocido historiador dijo: «Hacerle la guerra al Papa es hacerle la guerra contra Dios, ver al Papa es como ver a Dios, y Dios es el Papa». Decio dijo: «El Papa puede hacer todas las cosas que Dios puede hacer.» El Papa León XIII dijo de sí mismo: «El doctor supremo en la iglesia es el pontífice romano. La unión de los espíritus requiere, por tanto, con un acuerdo perfecto en la sola fe, una sumisión y una obediencia completa a la voluntad de la iglesia y del pontífice romano, como a Dios mismo.»

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El Papa Pío X

El Papa Pío X dijo: «El Papa no es solamente el representante de Jesucristo, sino que es el mismísimo Jesucristo oculto bajo el velo de la carne. ¿Está hablando el Papa? Es Jesucristo quien habla.» El Papa Pío XI una vez declaró: «Ustedes saben que yo soy el Santo Padre, el representante de Dios en la tierra, el Vicario de Cristo, lo que significa que yo soy Dios en la tierra.» ¡Todo esto es una blasfemia!

No hay ningún otro Dios:

«No tiemblen; no tengan miedo. ¿Acaso no proclamé Mis propósitos para ustedes hace mucho tiempo? Ustedes son Mis testigos, ¿hay algún otro Dios? ¡No! No hay otra Roca, ni una sola».» — Isaías 44:8 (NTV)

No le llamen a ninguna persona en la tierra «Padre»:

«Además, aquí en la tierra, no se dirijan a nadie llamándolo “Padre”, porque solo Dios, que está en el cielo, es su Padre espiritual.» — Mateo 23:9 (NTV)

Hay un solo Señor:

«Hay un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo»— Efesios 4:5 (NTV)

Jesucristo está en la gloria de Dios Padre:

«Y toda lengua declare que Jesucristo es el Señor para la gloria de Dios Padre.» — Filipenses 2:11 (NTV)

No busquen dominar:

«Compórtense no como si ustedes fueran los dueños de los que están a su cuidado, sino procurando ser un ejemplo para ellos.» — 1 Pedro 5:3 (DHH)

Palabras para los ancianos:

«Y ahora, una palabra para ustedes los ancianos en las iglesias. También soy un anciano y testigo de los sufrimientos de Cristo. Y yo también voy a participar de Su gloria cuando Él sea revelado a todo el mundo. Como anciano igual que ustedes, les ruego: cuiden del rebaño que Dios les ha encomendado. Háganlo con gusto, no de mala gana ni por el beneficio personal que puedan obtener de ello, sino porque están deseosos de servir a Dios. No abusen de la autoridad que tienen sobre los que están a su cargo, sino guíenlos con su buen ejemplo. Así, cuando venga el Gran Pastor, recibirán una corona de gloria y honor eternos.» — 1 Pedro 5:1-4 (NTV)

Pedro se llamó a sí mismo «presbítero» (anciano), no Papa. Él rechazó la adoración:

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Pedro le pidió al romano Cornelio que se levantara, y no permitió que lo adorara, ya que solamente a Dios se le rinde culto.

«Cuando Pedro entró en la casa, Cornelio cayó a sus pies y lo adoró; pero Pedro lo levantó y le dijo: «¡Ponte de pie, yo soy un ser humano como tú!».» — Hechos 10:25-26 (NTV)

Los apóstoles discutían acerca de quién era el más grande en el Reino de Dios, lo cual nos dice que ellos no reconocían a Pedro como la cabeza de la asamblea:

«Después de llegar a Capernaúm e instalarse en una casa, Jesús preguntó a Sus discípulos: «¿Qué venían conversando en el camino?». Pero no le contestaron porque venían discutiendo sobre quién de ellos era el más importante.»— Marcos 9:33-34 (NTV)

La riqueza y el poder de los papas romanos bien podrían haber sido compartidos por Pedro o cualquiera de los apóstoles. De hecho, ellos tenían carisma, ellos podían curar a los enfermos y resucitar a los muertos, y podían hacer muchos otros milagros. Ellos podrían haber acumulado oro, tierras y ejércitos victoriosos, sin embargo, ellos distribuyeron todo lo que estaba a su disposición:

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El hombre lisiado pedía dinero, pero Pedro le dio algo mucho mejor que eso, y lo curó en nombre de Jesucristo.

«Pero Pedro le dijo [a un hombre lisiado que esperaba recibir dinero]: «Yo no tengo plata ni oro para ti, pero te daré lo que tengo. En el nombre de Jesucristo de Nazaret, ¡levántate y camina!».»— Hechos 3:6 (NTV)

«No había necesitados entre ellos, porque los que tenían terrenos o casas los vendían y llevaban el dinero a los apóstoles para que ellos lo dieran a los que pasaban necesidad.»— Hechos 4:34 (NTV)

«Los apóstoles salieron del Concilio Supremo con alegría, porque Dios los había considerado dignos de sufrir deshonra por el nombre de Jesús.»— Hechos 5:41 (NTV)

¿Acaso el papado podría haber surgido a partir de tal humildad y sencillez? La función del Papa proviene de un origen pagano; dicha función no se puede justificar en las Escrituras. Debido al trabajo y ministerio del Espíritu Santo, tal puesto es innecesario y es incluso indeseable.

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