Primera Cosecha

Jesucristo, El Primer Fruto De Una Gran Cosecha (Parte 3)

Jesucristo, el primer fruto de la resurrección

Los judíos, ven el festival de “La Primera Cosecha” como un servicio puramente del Templo, con poca o ninguna relevancia para sus vidas, sobre todo hoy que no hay un Templo en Jerusalén y que vivimos en la ciudad, en la era de la información y tecnología, alejados completamente del campo, y sin tener noción acerca de los tiempos de cosecha. Pero para nosotros como creyentes en Jesucristo, este festival debería de estar entre los más importantes en el año, ya que representa el aniversario de la resurrección de nuestro Mesías. Tradicionalmente, nos hemos enfocado en la conmemoración de la crucifixión (que fue hecha el día de Pascua), sin embargo lo que lo hace especial todo el trabajo en la cruz es que Jesucristo resucitó al tercer día, y se reveló ante diferentes testigos el domingo durante la celebración del festival de “La Primera Cosecha”.

Jesus Resucitado mujeresEl domingo por la mañana temprano, mientras aún estaba oscuro, María Magdalena llegó a la tumba y vio que habían rodado la piedra de la entrada… Dio la vuelta para irse y vio a alguien que estaba de pie allí. Era Jesús, pero ella no lo reconoció.” — Juan 20:1, 14 (NTV)

El apóstol Pablo nos explica la importancia de la resurrección de Jesús. Nos dice que la muerte, el castigo por el pecado, fue introducida por Adán, y que todos hemos heredado esa naturaleza pecaminosa: Pecamos y estamos destinados a morir física y espiritualmente.

Pues todos hemos pecado; nadie puede alcanzar la meta gloriosa establecida por Dios.” — Romanos 3:23 (NTV)

Pues la paga que deja el pecado es la muerte, pero el regalo que Dios da es la vida eterna por medio de Cristo Jesús nuestro Señor.” — Romanos 6:23a (NTV)

Cristo murió para que los creyentes en Él, quienes estuvieran dispuestos a aceptar Su regalo de gracia, no experimentarán la muerte espiritual. Al momento de nuestra salvación recibimos el regalo de una nueva naturaleza, al Espíritu Santo, y ya no tenemos que temer a la muerte espiritual nunca jamás.

“Por tanto, no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús, los que no andan conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.” — Romanos 8:1 (RVC)

[Dice Jesús] «No teman a los que quieren matarles el cuerpo; no pueden tocar el alma. Teman solo a Dios, quien puede destruir tanto el alma como el cuerpo en el infierno.» — Mateo 10:28 (NTV)

El significado espiritual que nos revela el Festival de “La Primera Cosecha” es una “sombra”, o una representación de un evento real que se cumplirá en el futuro.

“En relación con los días de fiesta, la luna nueva o los días de reposo. Todo esto no es más que una sombra de lo que está por venir; pero lo real y verdadero es Cristo.” — Colosenses 2:16b-17 (RVC)

Jesus ResurrectedEn el programa que Jesús está siguiendo, el cumplimiento del festival ocurrió cuando Jesucristo (Yeshúa HaMashíaj en hebreo) resucitó al tercer día, venciendo a la muerte. Convirtiéndose en el primer fruto o la primera cosecha y siendo aceptado por el Padre. Pablo nos explica que donde hay un primer fruto, hay también una cosecha general que le sigue. Y los creyentes en Jesucristo, nos convertimos en el resto de la cosecha, que también resucitaremos, librándonos de la muerte espiritual y además tendremos cuerpos glorificados para poder convivir con Dios por toda la eternidad.

“Lo cierto es que Cristo sí resucitó de los muertos. Él es el primer fruto de una gran cosecha, el primero de todos los que murieron…  pero esta resurrección tiene un orden: Cristo fue resucitado como el primero de la cosecha, luego todos los que pertenecen a Cristo serán resucitados cuando Él regrese.” — 1 Corintios 15:20, 23 (NTV)

Jesús nos salva de la muerte porque lava con su sangre todos nuestros pecados. Por lo que el daño causado por Adán es borrado por completo.

“y de Jesucristo, el testigo fiel, primogénito de entre los muertos y soberano de los reyes de la tierra. Él nos amó; con Su sangre nos lavó de nuestros pecados.” — Apocalipsis 1:5 (RVC)

«Vengan ahora. Vamos a resolver este asunto—dice el Señor—. Aunque sus pecados sean como la escarlata, Yo los haré tan blancos como la nieve. Aunque sean rojos como el carmesí, Yo los haré tan blancos como la lana.» — Isaías 1:18 (NTV)

Por la resurrección ya no vivimos esclavizados al pecado, y no es que estemos libres del pecado, sino que vivimos con la seguridad de que nosotros también resucitaremos en nuevos cuerpos glorificados.

 “Pues nuestros cuerpos mortales tienen que ser transformados en cuerpos que nunca morirán; nuestros cuerpos mortales deben ser transformados en cuerpos inmortales.” — 1 Corintios 15:53 (NTV)

“Y los creyentes también gemimos —aunque tenemos al Espíritu Santo en nosotros como una muestra anticipada de la gloria futuraporque anhelamos que nuestro cuerpo sea liberado del pecado y el sufrimiento. Nosotros también deseamos con una esperanza ferviente que llegue el día en que Dios nos dé todos nuestros derechos como Sus hijos adoptivos, incluido el nuevo cuerpo que nos prometió.” — Romanos 8:23 (NTV)

tumba resurreccion
Jesucristo fue sepultado y luego resucitó al tercer día.

La tumba vacía de Jesús proclama que la ofrenda de la primera cosecha, o el primogénito de entre los muertos, ha sido presentado y aceptado por el Padre en el Templo del Cielo. Y por eso Jesús le pide a María Magdalena que no lo toque antes de que suba al cielo como nuestra ofrenda de “La Primera Cosecha”. Por lo que este festival ha tenido su cumplimiento profético en la resurrección del Mesías tres días después de Su crucifixión.

“—No te aferres a Mí —le dijo Jesús—, porque todavía no he subido al Padre; pero ve a buscar a Mis hermanos y diles: “Voy a subir a Mi Padre y al Padre de ustedes, a Mi Dios y al Dios de ustedes”.” — Juan 20:17 (NTV)

Otra de las razones por las cuales el festival de “La Primera Cosecha” es importante, es el cumplimiento del día de la semana en el que la resurrección se tenía que llevar a cabo: En un domingo. Como lo vimos en nuestro artículo, La cronología de la Crucifixión (Parte 4), Jesús resucitó en la noche del sábado, llamado el primer día judío de la semana, o domingo, cuando al atardecer del sabado. Jesús, el Señor del Shabát (Lucas 6:5), no vino a cambiar el Shabát (día de descanso en hebreo) del sábado al domingo (al haber resucitado el primer día de la semana), sino que Él resucitó un domingo para dar cumplimiento al Festival de “La Primera Cosecha”. La enseñanza del cambio del día de descanso fue introducida por la iglesia romana para que coincidiera con la religión pagana del culto al sol y alejarse de la religión judía (Constantino había declarado el domingo como día oficial de descanso en el imperio romano). No hay ningún cambio del Shabát, sigue siendo el sábado.

[Jesús dice:] “No malinterpreten la razón por la cual he venido. No vine para abolir la ley de Moisés o los escritos de los profetas. Al contrario, vine para cumplir sus propósitos.” — Mateo 5:17 (NTV)

Menorah FestividadesEn resumen, ya que Jesús resucitó, nosotros como Su iglesia también resucitaremos, porque ahora a los ojos del Padre, lo que es cierto en Jesús es cierto en nosotros, esta transferencia es un regalo por Su obediencia, lealtad al Padre, y Su vida sin pecado, que lo calificaron como el sustituto perfecto de todos nosotros con Su sacrificio en la cruz.

Él existía antes de todas las cosas, y por Él se mantiene todo en orden. Él es la cabeza del cuerpo, que es la iglesia. Él es el principio, el primogénito de entre los muertos, para tener la preeminencia en todo…  y por medio de Él reconciliar consigo todas las cosas, tanto las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de Su cruz.” — Colosenses 1:17-18, 20 (RVC)

[Dice Jesús] «pero en el mundo que vendrá, los que sean dignos de ser levantados de los muertos no se casarán, ni se darán en casamiento, ni volverán a morir. En este sentido, serán como ángeles. Ellos son hijos de Dios e hijos de la resurrección.» — Lucas 20:35-36 (NTV)

Jesús da cumplimiento a las Festividades del Señor, y aún hay eventos proféticos que están por suceder. Mientras tanto mantengámonos firmes en la fe en nuestras vidas. Los dejo con las palabras del apóstol Pablo a Timoteo antes de morir:

«He peleado la buena batalla, he terminado la carrera y he permanecido fiel.» — 2 Timoteo 4:7 (NTV)

¡Que Dios los bendiga!


Ir a: Jesucristo, el Primer Fruto de una Gran Cosecha (Parte 1)
Continuar Leyendo:La Tradición Saducea de “La Primera Cosecha”