Metanfetaminas

Las metanfetaminas – Las adicciones que nos alejan de Dios (Parte 1)

En el 2004 el policía Bret King del condado de Multnomah en Portland, Oregon, en los Estados Unidos, comenzó a notar el deterioro físico de las personas que eran arrestadas en múltiples ocasiones, y que a su vez eran adictas a las metanfetaminas. Durante ese año el 27% de los arrestados en ese condado estaban relacionados con esta droga, 1 de cada 4 arrestos eran adictos a las metanfetaminas. Los daños, cada vez más severos, eran muy evidentes en las caras de las personas. De forma que al oficial King se le ocurrió hacer una campaña de concientización anti-drogas al reunir fotografías de los registros policiacos de cuando los adictos a las metanfetaminas eran fichados y la llamó las «Caras del Meth» («Faces of Meth» en inglés). Formó una colección de fotos comparativas de antes y después, su intención era el mostrar los efectos devastadores de la adicción a esta droga. Algunas de las personas fotografiadas, en cuestión de tan solo unos meses (otros en cuestión de semanas), pasaban de tener unas caras normales y saludables a estar cubiertos de múltiples costras, faltarles dientes y comenzar a parecer calaveras.

Theresa Baxter meth face

Una de las “caras del Meth” fue Theresa Baxter, en su primera foto tenía 39 años de edad, fue arrestada por robo de identidad, fraude y posesión de narcóticos. La segunda foto fue tomada 3 años después, con su deterioro físico ya pesaba 20 kilos menos. En el 2014 fue entrevistada en prisión por el diario “The Oregonian” en donde dijo que drogarse con metanfetaminas «es lo más cercano a ser un zombie», se sentía como si estuviera muerta por dentro. Ella antes se drogaba con heroína, pero comenzó a usar metanfetaminas porque era más barato. Estando drogada podía estar despierta durante varios días, sin dormir. Y no podía comer porque la droga ocasionaba que el olor a comida le pareciera intolerable. Cuando Baxter estaba drogada no toleraba que nada la tocara, incluso el agua, de forma que no se bañaba. Cuando finalmente dormía dijo «cierras tus ojos y te desconectas, incluso la gente puede bailar sobre ti y no te das cuenta». De su dentadura superior solo le quedaban dos dientes frontales y uno de ellos era de color gris, a punto de caerse; Theresa dijo que ese diente se le caería como sus otros dientes en el siguiente bocado de comida.

¿De dónde surgieron las metanfetaminas?

Las metanfetaminas pertenecen a la familia de drogas llamadas anfetaminas, que son poderosos estimulantes hechos por el hombre que aceleran el sistema nervioso central. Provienen de la planta Ephedra Sinica. La ephedra crece principalmente en Mongolia, Rusia, China y más recientemente en el desierto de Estados Unidos y México, y en la costa del Pacífico en Sudamérica. Esta planta ha sido utilizada desde hace cientos de años por sus efectos estimulantes. Ha sido ampliamente utilizada en la medicina tradicional china como un tratamiento para resfriados, asma y para mayor energía.

“Su vid crece de la vid de Sodoma, de los viñedos de Gomorra. Sus uvas son veneno, y sus racimos son amargos. Su vino es veneno de serpientes, veneno mortal de cobras.” — Deuteronomio 32:32-33 (NTV)

chocolates Hildebrand pervitinA fines de los 1800s, las anfetaminas fueron sintetizadas (extraídas químicamente) a partir de la planta ephedra. En un inicio se comercializaron exitosamente por más de 30 años, siendo utilizadas hasta en los Juegos Olímpicos de 1936 bajo el nombre de Benzedrina. Este medicamento inspiró al químico alemán, Dr. Fritz Hauschild, quien sintetizó aún más la droga, desarrollando su propia versión mejorada, y un año más tarde, patentó la primera metil-anfetamina con el nombre de Pervitin (suena como una medicina perversa ¿no creen?). La farmacéutica Temmler la empezó a comercializar en Berlín, Alemania como un desarrollador del rendimiento y una ayuda para la auto-estima, rápidamente las metanfetaminas ganaron gran popularidad. Eran utilizadas por actores, secretarias, y conductores de trenes, ya que se podían comprar sin receta médica. Incluso se fabricaron chocolates con metanfetaminas de marca Hildebrand para ayudar a las amas de casa para que pudieran terminar el trabajo de la casa rápidamente y bajar de peso con solo comer 2 ó 3 chocolates, gracias al efecto supresor del apetito del Pervitin.

Hoy en día las metanfetaminas se conocen como meth, la forma más potente del meth es en forma de piedra, llamada «cristal», también es llamada «vidrio» o «hielo». Esta droga usualmente es fumada y el efecto dura mucho más tiempo (12 horas o más) que otros estimulantes. Otros nombres de esta droga son «velocidad» (speed), «tiza» (chalk), «galleta Scooby Snax», «Christina», “algodón de azúcar”, «basura», entre otros. Se vende como un polvo blanco que se puede inhalar, o mezclar con agua para ser inyectado, también se vende en tabletas para ser ingerido, o en cristal para ser fumado. La droga llega al cerebro en cuestión de segundos si es fumada o inyectada. Si es aspirada por la nariz, toma 3 a 5 minutos para que haga efecto. Si se toma como cápsula puede tardar unos 20 minutos para que sus efectos se sientan. Las anfetaminas son peligrosas porque sus efectos físicos y mentales son impredecibles a corto y largo plazo.

¿Cuáles son los efectos de las metanfetaminas?

La palabra metanfetamina proviene del griego μέθη – methé que significa “intoxicación” o “embriaguez” (borrachera). Esta palabra griega es utilizada por el apóstol Pablo en la carta a los Gálatas para describir el pecado de la «borrachera», el cual no tan solo incluye al alcohol, sino a las diferentes clases de substancias que producen una «intoxicación» en el cuerpo, y como en el caso de las metanfetaminas (o meth en inglés), implican tener una capacidad mental disminuida que nos aleja de Dios, además de que estamos dañando el cuerpo que Él nos dio.

«Cuando ustedes siguen los deseos de la naturaleza pecaminosa, los resultados son más que claros: inmoralidad sexual, impureza, pasiones sensuales, idolatría, hechicería, hostilidad, peleas, celos, arrebatos de furia, ambición egoísta, discordias, divisiones, envidia, borracheras [methé], fiestas desenfrenadas y otros pecados parecidos. Permítanme repetirles lo que les dije antes: cualquiera que lleve esa clase de vida no heredará el reino de Dios.» — Gálatas 5:19-21 (NTV)

Las metanfetaminas estimulan al sistema nervioso, y producen al principio efectos que parecieran positivos: reducen la fatiga; incrementan el nivel de alerta; sensación de mejor enfoque en las cosas; un flujo rápido de ideas y discurso; un sentido de gran confianza; disminución del apetito; producen sentimientos de euforia temporal.

“Me dije: «Vamos, probemos los placeres. ¡Busquemos “las cosas buenas” de la vida!»; pero descubrí que eso también carecía de sentido.” — Eclesiastés 2:1 (NTV)

Boca methSin embargo, siendo drogas, los efectos físicos negativos para el cuerpo también se manifiestan rápidamente: Con el uso de las metanfetaminas, las personas desarrollan algo llamado «boca meth», lo cual, se caracteriza por un severo deterioro de los dientes llegando incluso hasta perderlos. Los dentistas piensan que se deba a una combinación de factores: (1) el meth reduce la salivación y provoca resequedad en la boca, la cual a su vez contribuye al crecimiento de bacterias; (2) los efectos estimulantes del meth provocan un rechinar de dientes; (3) los drogadictos a menudo dejan de acudir a citas con el dentista e incluso dejan de lavarse los dientes.

Otros problemas físicos incluyen dolor de cabeza y mareos, dolor de estómago, espasmos musculares y problemas para respirar (sobre todo con el uso del cristal de meth), aumento de la presión sanguínea, latidos cardiacos rápidos e irregulares, desmayos. Estos efectos generalmente duran de 6 a 8 horas, pero a veces pueden durar hasta 24 horas. Siempre está presente la posibilidad de sobredosis (envenenamiento) con metanfetaminas.

«¿Quién tiene angustia? ¿Quién siente tristeza? ¿Quién es el que siempre pelea? ¿Quién está siempre quejándose? ¿Quién tiene moretones sin motivo? ¿Quién tiene los ojos rojos? Es el que pasa muchas horas en las tabernas, probando nuevos tragos.» — Proverbios 23:29-30 (NTV)

Los usuarios también pueden experimentar movimientos corporales repetitivos como mecerse, cruzar y descruzar las piernas constantemente, o marchar en su lugar. Se ha reportado que los usuarios del meth compulsivamente ensamblan y desensamblan cosas, repetidamente dibujan los mismos patrones, o acomodan objetos en diferentes categorías, una y otra vez, esto es llamado en inglés «tweaking» (retocar).

«Prometen libertad, pero ellos mismos son esclavos del pecado y de la corrupción porque uno es esclavo de aquello que lo controla.» — 2 Pedro 2:19 (NTV)

Efectos secundarios

Los adictos a las metanfetaminas pueden pasar días sin comer y sin dormir, mientras que tengan drogas disponibles permanecen bajo su efecto, pero cuando se les termina su abastecimiento, y se les pasa el efecto de la droga, entonces caen rendidos, exhaustos, como explicó Theresa en su entrevista.

“¡Tengan cuidado! No dejen que su corazón se entorpezca con parrandas y borracheras [methé], ni por las preocupaciones de esta vida.” — Lucas 21:34a (NTV)

Los adictos a las metanfetaminas a largo plazo tienen cambios de ánimo y de estado mental, presentando ansiedad y depresión tan pronto se acaba el efecto de la droga, y pueden volverse agresivos y violentos. Tienen problemas para dormir sufriendo insomnio como efecto del estimulante. La droga causa pérdida de memoria y experimentan confusión mental. Pero el Señor nos dice que las drogas no nos pueden satisfacer, solo Él puede llenar ese vacío en nuestros corazones.

“No se emborrachen con vino, porque eso les arruinará la vida. En cambio, sean llenos del Espíritu Santo.” — Efesios 5:18 (NTV)

Meth face2Las personas bajo los efectos a menudo sienten insectos imaginarios caminando bajo de su piel, de forma que se rascan de forma compulsiva causándose heridas y cicatrices sobre todo el cuerpo. Los adictos tienen alucinaciones, delirios y psicosis: reportan ver, escuchar o sentir cosas que solamente ellos pueden ver. Viven en un estado de paranoia, sintiéndose amenazados y creyendo que otros intentan dañarlos, también pueden ver alucinaciones. Otros efectos en los adictos son el experimentar patrones de pensamiento erráticos o extraños y perder completamente el contacto con la realidad. Los adictos tienen sentimientos suicidas, e intentan suicidarse especialmente cuando tienen síndromes de abstinencia al tratar de dejar la droga.

“Tendrás alucinaciones y dirás disparates. Te tambalearás como un marinero en alta mar, aferrado a un mástil que se mueve. Y entonces dirás: «Me golpearon pero no lo sentí. Ni siquiera me di cuenta cuando me dieron la paliza. ¿Cuándo despertaré para ir en busca de otro trago?».” — Proverbios 23:33-35 (NTV)

Los adictos a las metanfetaminas a menudo mueren como resultado de comportamientos psicóticos causados por la droga, no tanto por sobredosis (envenenamiento). Las personas drogadas con metanfetaminas han saltado de puentes y por las ventanas de edificios de departamentos, han caminado frente automóviles para que los atropellen, y han estrellado sus autos en establecimientos.

“La persona que se aparta del sentido común terminará en compañía de los muertos.” — Proverbios 21:16 (NTV)

A estos efectos mentales se le suman los efectos físicos de largo plazo causados por la desnutrición, daños severos a la piel, descalcificación de los huesos, susceptibilidad a las enfermedades. Es muy común la transmisión de enfermedades como el SIDA o la hepatitis por compartir jeringas. Diferentes órganos son afectados como el corazón, los adictos pueden padecer taquicardias, insuficiencia cardíaca, ataques cardiacos y embolias; al suprimir el apetito el adicto se vuelve anoréxico, y puede fallarle el hígado y los riñones; en el cerebro, se les pueden reventar los vasos sanguíneos causando un daño cerebral permanente; experimentan cambios en la estructura y función del cerebro afectando el pensamiento, la memoria y el movimiento, y pueden llegar a un estado de coma o muerte.

Los efectos estimulantes de las metanfetaminas en el cerebro

Tanto las anfetaminas como las metanfetaminas son psico-estimulantes potentes y adictivos. La metanfetamina tiende a tener un efecto más fuerte en comparación con la anfetamina debido a un ligero cambio en su estructura química que hace más fácil que la droga traspase la barrera de protección del cerebro. Esta barrera previene que moléculas potencialmente peligrosas que se encuentran en la sangre, entren al cerebro. Sin embargo, la metanfetamina puede cruzar esta barrera de protección, y como resultado, más cantidad de la droga llega al cerebro, de forma que produce un efecto de mayor duración que el de la anfetamina.

A diferencia del alcohol, la marihuana y la nicotina, que liberan dopamina en el cerebro de una forma indirecta, los psico-estimulantes como las metanfetaminas incrementan los niveles de dopamina en el cerebro de una forma directa. La dopamina tiene un papel central en fomentar los antojos o deseos por la droga en los adictos.

Sinapsis MethPara entender mejor lo que hacen los estimulantes en el cerebro, primero tenemos que ver cómo afectan la comunicación entre las neuronas a nivel sináptico. Cada neurona se comunica químicamente con otras neuronas a través de moléculas neurotransmisoras que son liberadas para transmitir un mensaje especifico y una vez que han hecho su trabajo son «aspiradas» de regreso a la neurona pre-sináptica por unas proteínas en la membrana celular llamadas transportadoras, para que puedan volver a ser reutilizadas cuando la neurona requiera mandar un nuevo mensaje.

La mayoría de las drogas imitan las acciones de los neurotransmisores y se adhieren a los receptores. Mientras que los estimulantes funcionan de forma diferente: en lugar de adherirse a los receptores, afectan a las proteínas transportadoras, encargadas de aspirar los neurotransmisores. De modo que las metanfetaminas estimulan a las neuronas haciendo que sus proteínas transmisoras en lugar de succionar, hagan lo contrario y rocíen como un spray los neurotransmisores como la dopamina de regreso a la sinapsis. Como resultado la dopamina se queda en la sinapsis más tiempo de lo normal, llevando a niveles anormales muy elevados (10 veces más altos que lo normal en el caso del meth) y se incrementa la excitación de la neurona receptora. Estos niveles tan elevados sobre-estimulan al circuito de recompensas. Para mayor información acerca del funcionamiento del sistema de recompensas puede ver el artículo El Alcohol las Adicciones que nos alejan de Dios: El Alcohol Parte 2 en la sección ¿Por qué es tan adictivo el alcohol?

El cerebro que nos dio Dios trata de compensar estos altísimos niveles de dopamina produciendo dinorfina, la cual inhibe la activación de las neuronas de dopamina, lo cual ayuda al cuerpo a eliminar los efectos de la droga. Sin embargo, resulta en una tolerancia a los efectos de la metanfetamina, la cual aumenta rápidamente en usuarios regulares, lo que significa que necesitan más y más de la droga para lograr el efecto deseado, dado que dosis subsecuentes de la misma droga producen menores efectos. Todo esto incrementa el riesgo de muerte por sobredosis (envenenamiento).

«Jeremías, dile al pueblo: “Esto dice el Señor: ‘Cuando una persona se cae, ¿acaso no vuelve a levantarse? Cuando descubre que está en un camino equivocado, ¿acaso no da la vuelta? Entonces, ¿por qué esta gente continúa en su camino de autodestrucción? ¿Por qué los habitantes de Jerusalén rehúsan regresar? Se aferran a sus mentiras y se niegan a volver. Escucho sus conversaciones y no oigo una sola palabra de verdad. ¿Hay alguien que esté apenado por haber hecho lo malo? ¿Alguien que diga: “¡Qué cosa tan terrible he hecho!”? ¡No! ¡Todos corren por el camino del pecado tan veloces como galopa un caballo a la batalla!» — Jeremías 8:4-6 (NTV)

Estas drogas cambian al cerebro, de forma que es cada vez más difícil dejarlas. Tanto la cocaína como las metanfetaminas son de las drogas que causan mayor adicción, especialmente cuando son fumadas o inyectadas. Cuando los adictos ven parafernalia de drogas, o lugares en donde la droga puede ser obtenida, o donde ha sido utilizada, todo esto se convierte en detonadores o desencadenantes, traen fuertes recuerdos, los cuales ocasionan fuertes impulsos por las drogas. Para mayor información puede ver el artículo El Alcohol las Adicciones que nos alejan de Dios: El Alcohol Parte 2 la sección Síntomas de abstinencia.

“No amen a este mundo ni las cosas que les ofrece, porque cuando aman al mundo no tienen el amor del Padre en ustedes. Pues el mundo solo ofrece un intenso deseo por el placer físico” — 1 Juan 2:15-16a (NTV)

La popularidad de las metanfetaminas en la actualidad

Breaking badLas metanfetaminas son populares entre los drogadictos ya que son relativamente fáciles de hacer utilizando químicos fácilmente disponibles, pese a que son tóxicos e inflamables. La efedrina y la pseudo-efedrina pueden ser utilizados como precursores para la fabricación de las metanfetaminas, de forma que los ahora llamados «meth cooks» (cocineros de meth) comenzaron a comprar enormes cantidades de antigripales y descongestionantes, como el Sudafed que se vende sin receta médica, para utilizar en sus laboratorios caseros. En el show de televisión “Breaking Bad” se muestran los esfuerzos de los protagonistas por obtener los precursores que necesitaban para fabricar las drogas. Lamentablemente, este programa incrementó el nivel de información entre el teleauditorio acerca del tema de los laboratorios de metanfetaminas caseros incrementando el problema de la adicción a esta droga.

“Qué alegría para los que no siguen el consejo de malos, ni andan con pecadores, ni se juntan con burlones; sino que se deleitan en la ley del Señor meditando en ella día y noche.” — Salmos 1:1-2 (NTV)

En los Estados Unidos, en un intento para reducir la fabricación ilegal del meth, el congreso americano pasó un acto llamado «Combat Methamphetamine Epidemic Act 2005″ (Acto para Combatir la Epidemia de las Metanfetaminas». Con esta ley se regularía la venta de las medicinas que tuvieran pseudo-efedrina, requiriendo que el comprador presentara identificación, y la cantidad era limitada y monitoreada. Otros países también han adoptado prácticas similares.

“Pero los hombres malos e impostores irán de mal en peor, engañando y siendo engañados.” — 2 Timoteo 3:13 (LBLA)

En el siguiente artículo continuaremos con el tema de las metanfetaminas, veremos cómo empezaron a ser utilizadas durante la Segunda Guerra Mundial en los ejércitos y siguen siendo empleadas hoy en día hasta por los terroristas, también como es que son prescritas a niños legalmente. Los dejo con la exhortación que nos da el apóstol Pablo para alejarnos de la obscuridad de las metanfetaminas y vivamos en la luz de nuestro Señor Jesucristo.

“Ya que nosotros pertenecemos al día, vivamos con decencia a la vista de todos. No participen en la oscuridad de las fiestas desenfrenadas y de las borracheras [methé], ni vivan en promiscuidad sexual e inmoralidad, ni se metan en peleas, ni tengan envidia.” — Romanos 13:13 (NTV)

¡Que Dios los bendiga!


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