Y Dios vio que la luz era buena. Luego separó la luz de la oscuridad.
«Y Dios vio»
Esta contemplación indica, primero, un lapso de tiempo, el tiempo inicia en el primer día de la Creación; y adicionalmente, tenemos la primer muestra de la persona de Dios (Elohím en Hebreo) en una sentencia que pronunciada el veredicto de la razón divina.
Se utiliza esta frase, diez veces en la narrativa de los seis días de la creación. La belleza y la sublimidad de la lengua aquí utilizada es la mejor introducción a la obra de la Creación. Dios (en Hebreo – Elohim) no hace ninguna preparación, no emplea ningún medio o elemento. Elohim habla y se hace. Su Palabra por sí sola contiene todas las cosas necesarias para el cumplimiento de Su voluntad. Elohim, con una orden, creó la luz (Salmos 148:5).