El procedimiento de confesión y curación descrito en Santiago 5:14-16 ha sido confundido a menudo con las señales milagrosas y maravillas que marcaron los comienzos del testimonio Cristiano. Como de costumbre, como lo es este caso, la cuestión es «¿Qué es lo que dice la Biblia?» y no «¿Qué es lo que quiero que diga la Biblia?». En otras palabras, la cuestión no es qué es lo popular o lo que la gente quiere, sino lo que el Señor nos comunica a través de Su Palabra. Debemos diferenciar el ministerio terrenal del Señor, de Su ministerio celestial, durante este periodo de gracia en el cual vivimos. Sus instrucciones para sanar fueron dadas a Sus apóstoles y discípulos para propósitos específicos, mientras Cristo estaba con ellos en la tierra. No es correcto Bíblicamente transferirlos a la era de la Iglesia, para cuyo periodo tenemos otras instrucciones dadas por nuestro Señor glorificado. Las únicas prescripciones en las epístolas para sanar a los enfermos (débiles) son: Seguir leyendo La Curación Física y la Restauración Espiritual