En el artículo anterior empezamos a hablar acerca de la idolatría con ídolos físicos y vimos que el cristianismo prohíbe hacer imágenes o esculturas de Dios, por más bellas que éstas puedan parecer. Ya que, al ofrecerle oraciones, incienso, flores, o hacerle algún altar a un ídolo, es estarle sirviendo, lo que es una transgresión del Segundo Mandamiento. La Biblia nos dice que adoremos a Dios en Espíritu y en verdad, que busquemos crecer espiritualmente pareciéndonos a Jesús. Es decir, que aspiremos a hablar, actuar y pensar como Él en cada momento de nuestras vidas.
Ahora hablaremos de otros tipos de ídolos que encontramos hoy en día, como la avaricia y la adicción; y veremos que el formar teologías propias (ídolos imaginarios) puede acarrear serias repercusiones.
Tabla de Contenidos del Artículo
Identificando Ídolos Actuales

En la actualidad, en la era de la información y del humanismo, quizás muchas personas no veneren a ídolos físicos como los que vimos en la primera parte de esta serie de artículos, ni tampoco los llamen dioses. Sin embargo, la humanidad no ha cambiado, solo substituyó el concepto de los ídolos religiosos que veneraban como dioses en la antigüedad, y los reemplazó con “valores e ideales sociales y culturales” derivados de la vida secular moderna.
Y aunque ahora no los llamen “ídolos”, son las cosas más importantes en sus vidas, usurpando así el lugar que únicamente le corresponde a Dios. Estos ídolos los podemos identificar al ver aquello en lo que la gente dedica más su tiempo, su talento, o su dinero.
Los ídolos actuales se originan principalmente de: las religiones hechas por el hombre, las corrientes filosóficas, el dinero, el poder, la fama, el trabajo, el estatus social, las posesiones, el placer, el entretenimiento, los hobbies. También pueden ser personas, como algún miembro de la familia, a quien se llega a consentir exageradamente, (Mateo 10:37). Los artistas de cine o de televisión, músicos, cantantes o deportistas también se han convertido en ídolos para muchas personas. Así que, en lugar de amar y adorar al Creador, y aspirar a ser como Jesús, gran parte de la humanidad aún prefiere adorar ídolos, sin importarles las advertencias que nos dan las Escrituras.
“No sean, pues, idólatras, como fueron algunos de ellos, según está escrito: «El pueblo se sentó a comer y a beber, y se levantó a jugar»… Por tanto, amados míos, huyan de la idolatría”. — 1 Corintios 10:7, 14 (NBLA)
“También desecharon Sus leyes y el pacto que Él había hecho con sus padres, y Sus amonestaciones con que los había amonestado. Fueron tras la vanidad y se hicieron vanos. Imitaban a las naciones que estaban a su alrededor, de las cuales el SEÑOR les había mandado no actuar como ellas”. — 2 Reyes 17:15 (RVA 2015)
El ídolo del Amor al Dinero

Todo aquello que proporciona una seguridad física corre el peligro de convertirse en uno de los mayores ídolos para las personas, como en el caso de la Parábola del Rico Insensato (Lucas 12:16-21). Esto los lleva a escoger una carrera o un trabajo, no porque de esa forma servirán mejor al SEÑOR, o a su comunidad, sino porque les da una estabilidad económica, una mayor cuenta bancaria, o bien, va de acuerdo a sus valores sociales. Lo mismo ocurre cuando escogen una casa o una relación sentimental, o personal.
Sin darse cuenta, las personas en ocasiones se prestan a hacer cosas que van contra la voluntad del SEÑOR con tal de supuestamente obtener «seguridad». Toda la seguridad que debemos buscar está en tener una buena relación con el SEÑOR, quien nos provee de todo lo que necesitamos.
“Entonces les contó una parábola: «La tierra de cierto hombre rico había producido mucho. Y él pensaba dentro de sí: “¿Qué haré, ya que no tengo dónde almacenar mis cosechas?”. Entonces dijo: “Esto haré: derribaré mis graneros y edificaré otros más grandes, y allí almacenaré todo mi grano y mis bienes. Y diré a mi alma: alma, tienes muchos bienes depositados para muchos años; descansa, come, bebe, diviértete”. Pero Dios le dijo: “¡Necio! Esta misma noche te reclaman el alma; y ahora, ¿para quién será lo que has provisto?”. Así es el que acumula tesoro para sí, y no es rico para con Dios»”. — Lucas 12:16-21 (NBLA)
El ETERNO, conociendo la obstinación y la falta de fe en el corazón humano, que se empeña en refugiarse en la falsa seguridad de las riquezas. Nos advierte que es imposible mantenerles lealtad tanto a Dios como al dinero. Al mismo tiempo, en Lucas 12, nos dice que no debemos preocuparnos por cómo mantenernos, sino que primero busquemos el Reino de Dios. Debemos buscar servir a Dios, y no preocuparnos por el dinero, ya que el SEÑOR en Su proveeduría nos da todo lo que necesitamos.
“Nadie puede servir a dos señores; porque aborrecerá al uno y amará al otro, o se dedicará al uno y menospreciará al otro. No pueden servir a Dios y a las riquezas”. — Mateo 6:24 (RVA 2015)
[Jesús dice] “Así que no se preocupen ni se angustien por lo que han de comer, ni por lo que han de beber. Todo esto lo busca la gente de este mundo, pero el Padre sabe que ustedes tienen necesidad de estas cosas. Busquen ustedes el reino de Dios, y todas estas cosas les serán añadidas”. — Lucas 12:29-31 (RVC)
Lamentablemente, el amor al dinero es un ídolo que controla la vida de muchas personas en nuestra sociedad, porque el mundo le ha asignado un valor muy alto, al punto que en nuestra cultura las personas se miden por sus logros personales, o por cuánto dinero tienen en su cuenta bancaria, su avaricia se convierte en una adicción que las aleja de Dios. Puede ver las repercusiones que tiene esta clase de idolatría en nuestro artículo La Ilusión de la Riqueza Terrenal.
“Porque el amor al dinero es raíz de todos los males; el cual codiciando algunos, fueron descarriados de la fe y se traspasaron a sí mismos con muchos dolores”. — 1 Timoteo 6:10 (RVA 2015)
“También les dijo: «Manténganse atentos y cuídense de toda avaricia, porque la vida del hombre no depende de los muchos bienes que posea»”. — Lucas 12:15 (RVC)
Ídolos Humanos

Otra forma de idolatría es cuando las personas se obsesionan con alguna persona, puede ser alguien famoso como algún artista de cine, cantante o deportista famoso. Sin embargo, la fama no es requisito, hay quienes idolatran a algún familiar cercano, como a un hijo o a una madre. Hay padres de familia que están tan orgullosos de sus hijos, que no dejan de hablar de ellos, de sus actividades, de sus logros, y están rodeados de sus fotos.
[Jesús dice] “El que ama a padre o a madre más que a Mí no es digno de Mí, y el que ama a hijo o a hija más que a Mí no es digno de Mí”. — Mateo 10:37 (RVA 2015)
Nuestra cultura ha vuelto muy común el promover la idolatría de personas famosas, como los futbolistas. Hace algún tiempo supe de un hombre que tenía una obsesión con un equipo deportivo de fútbol soccer, toda su casa la tenía decorada con los colores y logotipo de ese equipo (incluyendo la piscina de su patio), estaba lleno de mercancía del equipo, pareciera que para él lo más importante en la vida era su equipo favorito de fútbol y lo que sucedía con ellos en sus partidos. ¡Imagine si toda esta devoción la enfocaran a Dios! El SEÑOR dice que hablamos de las cosas que tenemos en el corazón.
[Jesús dice] “Porque de la abundancia del corazón habla la boca”. — Mateo 12:34b (NBLA)
Las Adicciones son otra Forma de Idolatría

Cada vez que las personas deciden refugiarse en un ídolo en lugar de poner su fe en Dios para que les satisfaga sus necesidades, las personas tiene que pagar un precio por sus actos, y dicho precio es muy evidente cuando las personas se hacen adictas al alcohol o a las drogas como la marihuana, opioides, anfetaminas, etc.
El alcohólico puede negar tener una adicción, o bien puede decir que no idolatra eso, sin embargo, las acciones de los adictos demuestran la realidad, que dicha sustancia tóxica controla sus vidas y se convierte en lo más importante para ellos, transgrediendo así tanto el Primer como el Segundo Mandamiento. La idolatría de su adicción los lleva a cometer otros pecados (robos, asesinatos, etc.) y siempre lleva a las personas más lejos de donde querían ir, y ese camino conduce a la muerte.
“¡Ay de los que se levantan muy de mañana para ir tras la bebida, y siguen hasta la noche, hasta que el vino los enciende! En sus banquetes hay arpas, liras, tamboriles, flautas y vino; pero no consideran lo que el SEÑOR ha realizado ni miran la obra de Sus manos”. — Isaías 5:11-12 (RVA 2015)
“Al contrario, cada uno es tentado cuando se deja llevar y seducir por sus propios malos deseos. El fruto de estos malos deseos, una vez concebidos, es el pecado; y el fruto del pecado, una vez cometido, es la muerte”. — Santiago 1: 14-15 (RVC)
Uno de los principales problemas que las personas con adicciones pueden enfrentar, es que Satanás utiliza este tipo de idolatría para que lleguen a un estado de conciencia alterado o de trance por la intoxicación al estar ebrios. Cuando pierden el control sobre sí mismos, las barreras naturales de protección que hay en la mente consciente de las personas se pierden, esto lleva a que las barreras espirituales también se desvanezcan, dejando a las personas expuestas para que los demonios puedan habitar el cuerpo del adicto.
Por esta razón, la agenda demoniaca del mundo promueve el alcoholismo como una droga socialmente aceptable. ¿Ha notado que, en casi todos los programas de televisión o películas, los protagonistas están constantemente tomando alcohol? Lo hacen cuando están celebrando, cuando están felices, cuando tienen problemas, cuando están tristes, o simplemente, cuando se reúnen. Muy a menudo se muestra a los protagonistas en bares, como parte de las escenas, o si están en algún restaurante o en sus casas están tomando vino o cerveza ¿Acaso no es de sorprendernos que las personas imiten en la vida real el comportamiento de sus actores favoritos que se han convertido en ídolos?
Antes, Hollywood además promovía el consumo de cigarros, pero en años recientes, además del alcohol, Hollywood ahora está promoviendo la drogadicción, haciéndola ver como algo «normal», «cómico», «inteligente», o «deseable». ¿Cuánta gente habrá sido afectada por series de televisión como “Breaking Bad”? O los programas donde los protagonistas se “relajan” con marihuana al final del día. Para mayor información puede ver el artículo La Marihuana/Cannabis — Las Adicciones Que Nos Alejan De Dios (Parte 3).
Aunque las adicciones al alcohol y a las drogas son las más famosas por lo destructivas que son, hay otras adicciones, facilitadas por la tecnología, que también llegan a controlar a las personas, tales como: los videojuegos, los teléfonos celulares, las redes sociales, y los juegos de azar y apuestas (desde comprar boletos de lotería hasta apostar activamente en casinos), para mayor referencia con respecto a este último punto puede ver nuestro artículo ¿Existe la suerte? El problema de estos ídolos es que las personas una vez que son adictas, no les es tan fácil escapar de esta influencia, ni regresar a la normalidad, son una trampa que los esclaviza.
“Por lo tanto, hagan morir en ustedes todo lo que sea terrenal: inmoralidad sexual, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia. Eso es idolatría”. — Colosenses 3:5 (RVC)
“Porque sabéis esto, que ningún fornicario, o inmundo, o avaro, que también es servidor de ídolos, tiene herencia en el Reino del Cristo, y de Dios”. — Efesios 5:5 (JBS)
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