En el artículo anterior vimos cómo las bestias del campo se han infiltrado a la iglesia como lobos y zorros para destruirla con sus cultos y sus falsas doctrinas. Basta con ver los pobres frutos que produce la iglesia en la actualidad, y lo dividido que está el cristianismo con miles de denominaciones, para ver el éxito de los ataques de estas bestias. Ahora hablaremos de 6 formas en las que usted puede identificar los engaños de estas bestias irracionales. También veremos otra clase de bestias: los perros. Y concluiremos con las terribles bestias del Apocalipsis.
Tabla de Contenidos del Artículo
6 Formas de Identificar su Engaño
A continuación, le presentamos 6 características de cómo usted puede identificar a estos zorros, chacales o lobos, lo que le permitirá aumentar su discernimiento espiritual cuando analice sus doctrinas. Identifíquelos:
- Por lo que enseñan, pregúntese: ¿cómo se comparan sus enseñanzas con las de la Biblia?
- Por lo que niegan: El apóstol Pedro nos advirtió sobre las herejías de quienes niegan a Cristo o Su regalo de gracia al morir en la cruz.
“Pero hubo falsos profetas entre el pueblo, como también entre ustedes habrá falsos maestros que introducirán encubiertamente herejías destructivas llegando aun hasta negar al soberano Señor que los compró, acarreando sobre sí mismos una súbita destrucción”. — 2 Pedro 2:1 (RVA-2015)
- Por la información que omiten en su predicación: como el arrepentimiento, la santificación al obedecer la ley de Dios, el no condenar el pecado (idolatría, homosexualidad, etc.). Sus enseñanzas ¿se enfocan en satisfacer la mente carnal y los sentimientos de quienes los escuchan? ¿Satisfacen la comezón de oídos carnales (2 Timoteo 4:3-4)?
“Porque vendrá el tiempo cuando no soportarán la sana doctrina; más bien, teniendo comezón de oír, amontonarán para sí maestros conforme a sus propias pasiones y, a la vez que apartarán sus oídos de la verdad, se volverán a las fábulas”. — 2 Timoteo 4:3-4 (RVA-2015)
- Por quién recibe la gloria: Con sus enseñanzas ¿se glorifican a sí mismos o a otros hombres? ¿Hacen alarde de los “dones espirituales” que han recibido? ¿Les gusta recibir halagos? O bien, ¿Buscan que únicamente sea Dios quien reciba toda la gloria?
- Por sus frutos los conocerán (Mateo 7:16-20): ¿Cuáles son los frutos de sus enseñanzas?
“Por sus frutos los conocerán. ¿Acaso se recogen uvas de los espinos o higos de los cardos?”. — Mateo 7:16 (NBLA)
- Por su motivación: ¿Está alimentando al rebaño voluntariamente o tiene afanes de lucro (1 Pedro 5:2)?
“Pastoreen el rebaño de Dios entre ustedes, velando por él, no por obligación, sino voluntariamente, como quiere Dios; no por la avaricia del dinero, sino con sincero deseo”. — 1 Pedro 5:2 (NBLA)
Los Perros
Otra bestia del campo mencionada en las Escrituras son los perros. Los judíos se referían a los gentiles como “perros” (Mateo 7:6, 15:26-27). La profecía del Salmo 22 nos describe el terrible comportamiento de los malvados soldados romanos, porque como perros de caza, rodearon a Jesucristo, lo torturaron despiadadamente como bestias salvajes, y lo crucificaron. En el título de este salmo Cristo es llamado el “Ciervo de la Mañana”, quien fue perseguido por los judíos y finalmente rodeado y capturado por los perros.
“Me ha cercado una banda de malvados; ¡me tienen rodeado, como perros! ¡Han taladrado mis manos y mis pies!”. — Salmo 22:16 (RVC)
“Para el director del coro. Con la melodía de el “Ciervo de la Mañana”. Salmo de David. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado? [Eli, Eli, lamah azavtani?] ¿Por qué estás tan lejos de mi salvación y de las palabras de mi clamor?”. — Salmos 22:1 (NBLA)
En Isaías 56:10-11, tenemos otra pista sobre el significado simbólico de esta palabra clave, ya que se menciona que también pueden ser pastores voraces quienes no se sacian, porque solo buscan su propio beneficio (2 Pedro 2). Como cristianos, son los centinelas o vigilantes que no “ladran”, no dan la alarma para advertir a otros creyentes sobre los peligros que los rodean. Con lo anterior, podemos concluir que los “perros” se refiere simbólicamente tanto a “cristianos” nominales (de nombre) como a incrédulos, quienes son los trabajadores de iniquidad, malvados, los malos obreros, malhechores, son personas que andan ocupadas haciendo el mal (2 Pedro 2:19; Jeremías 15:3; Salmo 59:2,6).
“Los centinelas de Israel son ciegos, Ninguno sabe nada. Todos son perros mudos que no pueden ladrar, Soñadores acostados, amigos de dormir; Y los perros son voraces, no se sacian. Ellos son pastores que no saben entender. Todos se han apartado por su propio camino, cada cual, hasta el último, busca su propia ganancia”. — Isaías 56:10-11 (NBLA)
Tanto el apóstol Pedro como Pablo nos advierten sobre la influencia de estos cristianos (de nombre), quienes como perros regresan a su propio vómito. Esto hace referencia a que después de haber conocido el camino de la salvación, al Pan de Vida, el alimento que nutre al cuerpo y al espíritu; prefieren regresar a su vida de pecado en el mundo, a la inmundicia de la oscuridad (2 Pedro 2:20-22).
“Como perro que vuelve a su vómito así es el necio que repite su insensatez”. — Proverbios 26:11 (RVA 2015)
“Cuídense de esos perros, cuídense de los malos obreros, cuídense de la falsa circuncisión”. — Filipenses 3:2 (NBLA)
La palabra “perros” también se utiliza para describir a personas inmundas, impuras, sucias o asquerosas, son quienes se deleitan en sus abominaciones. En Deuteronomio 23:18, son llamados “perros” los hombres que se prostituyen sexualmente. Simbólicamente, son personas que se prostituyen al ir tras los ídolos en este mundo y rechazan al SEÑOR. Estas son las bestias que no entrarán en la ciudad del SEÑOR descrita en Apocalipsis 22:15.
“No traerás la paga de una ramera ni el sueldo de un perro a la casa del SEÑOR tu Dios para cualquier ofrenda votiva, porque los dos son abominación para el SEÑOR tu Dios”. — Deuteronomio 23:18 (NBLA)
“Pero los perros estarán afuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras y todo aquel que ama y practica la mentira”. — Apocalipsis 22:15 (RVR-1995)
Las Bestias del Apocalipsis
El libro del Apocalipsis habla de 2 bestias: la primera es el anticristo (Apocalipsis 13:1-10), el cual no es solo una persona que aparecerá en el futuro con súper poderes de maldad, como lo enseña el futurismo dispensacional jesuita. Precisamente, esta es una de las doctrinas que los lobos han popularizado hoy en día dentro del cristianismo. Este engaño hace que los cristianos permanezcan pasivos en espera de este super villano que aparecerá en el futuro, o peor aún, que estén esperanzados a que ocurra el rapto secreto, para que sean librados de cualquier sufrimiento causado por el anticristo.
Cuando en realidad, los muchos anticristos están trabajando en equipo, y lo han hecho durante siglos, avanzando su ataque al reino de Dios aquí en la tierra. Lo están haciendo desde muchos frentes, y podemos ver la efectividad de sus trabajos perjudiciales, al ver cómo han destruido a la iglesia, no solo desde afuera, sino también desde adentro. El espíritu de anticristo está matando espiritualmente a los cristianos carnales las 24 horas del día, al mantenerlos en la ignorancia de la Palabra del SEÑOR y no permitirles crecer y convertirse en cristianos espirituales. Y no solo eso, también está matando físicamente a los cristianos que se interponen en sus planes, y la iglesia no hace nada por defenderse.
Múltiples Anticristos
La Biblia nos alerta acerca del ataque de estas múltiples bestias. El apóstol Juan nos dijo que ya existían muchos anticristos desde la época en la que vivía, que no nos dejemos engañar con la historia de que va a venir uno solo en el futuro (2 Juan 1:7; 1 Juan 4:3). Estos anticristos que ya existían desde sus tiempos, se han multiplicado, coordinado y unificado hasta nuestros días, siendo la prueba de que ya estamos viviendo en los últimos tiempos (1 Juan 2:18).
“Porque muchos engañadores han salido al mundo, quienes no confiesan que Jesucristo ha venido en la carne. Tal persona es el engañador y el anticristo”. — 2 Juan 1:7 (RVA-2015)
“Hijitos, ya es la última hora; y como oyeron que el anticristo había de venir, así también ahora han surgido muchos anticristos. Por esto sabemos que es la última hora”. — 1 Juan 2:18 (RVA-2015)
La bestia o el anticristo no es algo futuro, sino que se trata de una sucesión de bestias, como lo vimos en nuestro artículo Los Dos Testigos del Apocalipsis — Los 2 Olivos. Se refiere al sistema político de gobierno que ha controlado al mundo desde los tiempos de Nabucodonosor y que continuará como fue profetizado por Daniel, a través del Imperio Romano haciéndose más poderoso y bestial hasta que ocurra la Segunda Venida de Jesucristo (Daniel 2, 7). Su gobierno no representa la autoridad de Dios, sino que es bestial (leopardo, oso, león) y es tiránico (Apocalipsis 13:1-10).
La Segunda Bestia de Apocalipsis
La segunda bestia del Apocalipsis (Apocalipsis 13:11-18), quien tampoco es una sola persona, proviene de los moradores de la tierra. Su función principal es dar soporte al poder político de la primera bestia, con sus dos cuernos extiende sus tentáculos con sus poderes religiosos y económicos. Estas bestias son parte de sociedades secretas que aparentan ser tan inocentes como un cordero, pero que llevan a cabo todos sus terribles actos tras bambalinas.
Se caracterizan por el engaño, al hablar como el dragón (Apocalipsis 12:9), el padre de las mentiras, el diablo. Promueven el falso sistema religioso heredado a Roma desde Babilonia. Esto incluye miles de falsas religiones, filosofías seculares, tradiciones culturales y ateísmo, para confundir, y así evitar que las personas encuentren el regalo de gracia de la salvación que nos da Jesucristo. Además, se han asegurado de corromper las enseñanzas del cristianismo con los perros, zorros y lobos que se han infiltrado en la iglesia.
A través del poder económico de la bestia, controlan a la gente con el dinero. Le roba con impuestos, inflación y otros esquemas financieros para que se mantengan ocupados trabajando en exceso solo para subsistir. Mientras que las bestias obtienen su dinero como lo hacían los magos de Babilonia, lo inventan sacándolo de la nada en sus bancos, tan solo imprimiendo dinero que no está respaldado con oro.
Con este poder crean empresas multimillonarias con control global. Así invierten el dinero en armamento para matar a la población y destruir el mundo. Desarrollan químicos que intoxican a las personas poco a poco. Promueven drogas que causan adicción y muerte. Crean medicamentos que cubren los síntomas, pero que no sanan a las personas. Mutan genéticamente a los alimentos, afectando a las plantas, animales y personas. También, producen toda clase de entretenimiento para mantener a la gente tranquila, evitando que se rebelen contra las bestias con: películas, programas de televisión, eventos deportivos, noticias, videojuegos, redes sociales y centros de apuestas, etc.
Los Frutos de las Bestias
En conjunto, estas dos bestias del Apocalipsis tienen el control político, económico, cultural y religioso de todas las naciones del mundo, desde los tiempos del apóstol Juan hasta el día de hoy. También son ellos los que desatan guerras, y mediante propaganda les venden la idea a los soldados (quienes son valientes por defender a su patria) para que participen, pero que en realidad son enviados como un sacrificio para Satanás.
“Será terminado el pacto de ustedes con la muerte, su convenio con el Seol no quedará en pie. Cuando pase el azote abrumador, ustedes serán pisoteados por él”. — Isaías 28:18 (NBLA)
“Seis cosas hay que el SEÑOR odia, y siete son abominación para Él: Ojos soberbios, lengua mentirosa, manos que derraman sangre inocente, un corazón que trama planes perversos, pies que corren rápidamente hacia el mal, un testigo falso que dice mentiras, y el que siembra discordia entre hermanos”. — Proverbios 6:16-19 (NBLA)
Las fluctuaciones de los mercados y metales preciosos, las caídas de las monedas y la inflación también están controlados por estas bestias. Organizaciones como la ONU y la OMS, son organismos bajo estas bestias para imponer medidas totalitarias como las que vimos en las pandemias, donde todos los países tienen que seguir protocolos arbitrarios enfocados en avanzar los planes de las bestias, no para ayudar a la población.
“‘¡Maldito el que hiera de muerte a su prójimo en secreto!’. Y todo el pueblo dirá: ‘¡Amén!’. — Deuteronomio 27:24 (RVA 2015)
¡Ay del que edifica la ciudad con sangre, y del que funda una ciudad con iniquidad! — Habacuc 2:12 (RVR 1960)
Este sistema de las bestias del Apocalipsis ha sido perfeccionado al punto que no solo controla a las “bestias de la tierra” (o del campo), sino que las mismas personas son utilizadas como instrumentos de muerte para destruir la creación del SEÑOR (Apocalipsis 6:8). Buscan matar a la mayor cantidad de personas. El rey Salomón dijo que: “No hay nada nuevo bajo el sol”. Por ejemplo, algunas bestias de la antigüedad son el faraón egipcio y Balak, quienes buscaban matar porque pensaban que “había mucha gente” y eso los atemorizaba (Éxodo 1; Números 22:2-6). ¿Puede encontrar alguna semejanza con lo que sucede hoy en día? ¿Puede identificar quiénes son actualmente estas bestias del campo?
“Y miré, y he aquí un caballo pálido; y el que estaba montado sobre él se llamaba Muerte; y el Hades le seguía muy de cerca. A ellos les fue dado poder sobre la cuarta parte de la tierra, para matar con espada y con hambre y con pestilencia, y por las fieras del campo.” — Apocalipsis 6:8 (RVA 2015)
“Pero tengo unas pocas cosas contra ti, porque tienes ahí a los que mantienen la doctrina de Balaam, que enseñaba a Balac a poner tropiezo ante los israelitas, a comer cosas sacrificadas a los ídolos y a cometer actos de inmoralidad.” — Apocalipsis 2:14 (NBLA)
El control sobre toda la humanidad que ejercen estas 2 bestias tiene un solo objetivo en cada generación: que las personas reciban la marca de la bestia y adoren a Satanás, el dragón (Apocalipsis 13:4). Y vemos el éxito de estas bestias, porque nuestra sociedad se ha vuelto más violenta, sanguinaria y bestial, porque sus pecados, transgresiones e iniquidad, los han alejado cada vez más del SEÑOR.
Y la situación seguirá empeorando con las guerras, hambruna, pestilencia, y las bestias del campo, hasta que la humanidad llegue al colmo de la paciencia del Todopoderoso, como en los días de Noé en los que: “toda intención de los pensamientos de su corazón era solo hacer siempre el mal”. Como resultado el ETERNO enviará Su Juicio Final para esta era, y experimentemos el Día del SEÑOR. Para los creyentes, es el día del regreso triunfante de nuestro Señor Jesucristo sobre todos Sus enemigos.
“Y adoraron al dragón que había dado autoridad a la bestia, y adoraron a la bestia, diciendo: «¿Quién como la bestia y quién podrá luchar contra ella?” — Apocalipsis 13:4 (RVR-1995)
“¡Si fueron ellas las que, aconsejadas por Balán [Balaam], hicieron que los israelitas traicionaran al SEÑOR en Baal Peor! Por eso una plaga hirió de muerte al pueblo del SEÑOR”. — Números 31:16 (NVI)
No Debe Temer a las Bestias del Campo
Para los creyentes que viven en obediencia a los mandatos del SEÑOR, estas bestias del campo, no deben de quitarnos el sueño, ni nuestra paz en Jesucristo. En Isaías 5:2, el SEÑOR habla acerca de Su viña (que somos todos quienes hemos puesto nuestra fe en Él), encontramos que Él la amuralló o cercó, esto es precisamente para resguardarla de las bestias del campo. La torre que edificó también es utilizada para que los centinelas puedan ver a distancia, y así frustrar cualquier plan de ataque de Sus enemigos. Dios nos alerta contra estas personas y nos advierte de los peligros, antes de que sucedan.
[Jesús dice] “No teman a los que matan el cuerpo pero no pueden matar al alma. Más bien, teman a aquel que puede destruir tanto el alma como el cuerpo en el infierno”. — Mateo 10:28 (RVA 2015)
“Libra mi alma de la espada; libra mi única vida de las garras de los perros.” — Salmo 22:20 (RVA 2015)
En el Salmo 80 encontramos que el SEÑOR tiene todo dominio sobre la viña que Él plantó. Él tiene el control sobre todas las bestias del campo, y es quien permite que el jabalí devore Su viña (Salmos 80:13). Por lo que, las bestias del Apocalipsis, los falsos profetas, los falsos pastores, los gobernantes, y demás bestias del campo, tienen un propósito en el plan del ETERNO, porque todo es para Su gloria.
“El SEÑOR ha hecho todo para Sus propios propósitos, incluso al perverso para el día de la calamidad”. — Proverbios 16:4 (NTV)
“Ya que la vida de todo ser viviente está en Sus manos, así como el aliento de todo ser humano”. — Job 12:10 (NTV)
Esperamos que estas palabras clave, le sirvan para sus futuros estudios bíblicos y lo ayuden a entender mejor las Escrituras.
¡Que Dios los bendiga!
