Dumitru y Michael

Profecías de Dumitru: El Salvador Regresa como Juez (Parte 6)


En el artículo anterior vimos lo terrible que es el alma del hombre que solo busca pretextos para hacer guerras con sus semejantes. Ahora hablaremos del ataque espiritual al que se enfrentarán los cristianos, y como es que los creyentes devotos van a ser protegidos por el ejército celestial. También veremos que tal vez ya esté por completarse, o quizás incluso ya se haya llenado la última página del Libro de los Gentiles. Hablaremos del origen de los desastres naturales que están ocurriendo en todo el mundo. Y finalmente, veremos que cuando regrese nuestro Señor Jesucristo, el juicio iniciará y será más estricto para los cristianos.



“Porque es tiempo de que el juicio comience por la casa de Dios. Y si primero comienza por nosotros, ¿cómo será el fin de aquellos que no obedecen al evangelio de Dios?” — 1 Pedro 4:17 (RVA 2015)

La Bestia Ataca

Papa sentado trono con cruz invertida

Comentario de Rafael: Las manifestaciones físicas de guerras, son originadas en el reino espiritual de Satanás. Por eso, me llama la atención que Dumitru menciona al papa. Ahora con León XIV, se presenta nuevamente un espíritu de anticristo, que va a hacer guerra espiritual contra los creyentes. Recuerden que el Catolicismo de Roma enseña otro evangelio (2 Corintios 11:4). No es un evangelio de salvación solo por gracia al poner nuestra fe solo en Cristo, sino que es por obras, por obediencia a tradiciones de hombres, y está lleno de idolatría y sincretismo. Este engaño demoniaco está impidiendo que millones reciban la vida eterna.

En esta profecía, vemos cómo YAHWEH tiene un ejército más grande y poderoso, que está listo para defender a los creyentes de todo lo que viene (Josué 1:8-9; Deuteronomio 20:4; Salmos 121:7-8). La condición es que nos arrepintamos de nuestros pecados, vivamos de una forma agradable ante los ojos de Dios, y pongamos nuestra fe en que Él va a ser nuestra protección durante los tiempos más difíciles que se aproximan. ¡Que grandioso es YAHWEH, alabado sea Su Nombre!

“Porque el SEÑOR su Dios va con ustedes, para combatir por ustedes contra sus enemigos y para darles la victoria”. — Deuteronomio 20:4 (RVA-2015)

El ángel del SEÑOR acampa alrededor de los que le temen, y los rescata”. — Salmos 34:7 (NBLA)

Profecía del 21 de enero de 1995. La puede encontrar en este enlace.

(El hermano Dumitru Duduman estaba en Rumania en ese momento)

Me quedé dormido alrededor de la medianoche. Como a las 2:00 a. m., oí una voz fuerte diciéndome: «¡Dumitru! ¡Despierta! ¡Debo enseñarte algo!». Aunque estaba enfermo, me puse de pie de un salto, sin darme cuenta de que estaba despierto. Entonces me di cuenta de que ni siquiera estaba en Rumania. Me vi a mí mismo en América [los Estados Unidos].

Una voz poderosa me habló muy estricto: «¿Por qué te has desalentado? ¿Por qué trataste de cuestionar a Dios, pensando en tu corazón que te había abandonado? ¿Por qué guardas tanta tristeza en tu corazón, y tan gran lamento porque tomé a tu esposa? ¿Por qué te has permitido a ti mismo volverte desalentado, tanto que ya no podrás trabajar para mí como lo habías hecho hasta ahora? Por eso he venido a ti, para mostrarte una revelación que debes decirle al pueblo estadounidense».

La voz retumbó hacia mí, diciéndome que mirara a mi derecha. Estaba despierto, no durmiendo. Estaba de pie y giré mi cabeza como me ordenaron. Al mirar, vi que había una gran parvada de pájaros negros, con picos grandes y muy afilados. De los picos salía una luz cegadora, la cual muy apenas podía ver. De sus colas vi que salían llamaradas de fuego. Me asusté mucho. Me froté los ojos, pensando que estaba durmiendo y soñando. Pero no estaba durmiendo ni soñando.

Los pájaros de esta parvada, de repente se convirtieron en aviones que no hacían ningún ruido. Eran aviones estadounidenses que se elevaban, intentando atacar. Pero cuando se acercaban, caían a tierra en una llamarada de fuego.

Una vez más, escuché la voz, pero no podía ver quién me hablaba. La voz dijo: «Mira más alto que los aviones negros». Cuando miré por encima de los aviones, vi a un helicóptero que sobrevolaba sobre ellos. A un lado del helicóptero había una plataforma, como la de un barco, en donde se alineaban soldados vestidos de negro, todos armados del mismo modo y de aproximadamente el mismo tamaño. Desde el centro del helicóptero, una plataforma comenzó a elevarse. Se elevó más alto que el helicóptero mismo.

En la plataforma había un trono. El Papa estaba en el trono, gritando con fuerte voz: «Me ha sido dado el poder de gobernar la tierra y para luchar contra los protestantes, para que pueda vencerlos».

Mientras lo observaba con terror y miedo, pues estaba rodeado por una poderosa fuerza compuesta por aviones y personal, de repente apareció una nube blanca y los cubrió, de modo que ya no podía ver nada. De en medio de la nube blanca salió un hombre vestido con ropas brillantes, llevaba una corona reluciente sobre su cabeza. Él me habló. Su voz sonaba como trueno. Cuando escuché su voz, caí al suelo.

Él dijo: «Recuerda todo lo que has escuchado, todo lo que has visto y todo lo que oirás. Dile a Mi pueblo, porque una vez más quiero trabajar contigo más que hasta ahora. Los ejércitos, y los aviones que viste, y la Bestia que estaba sentada en el helicóptero: estos son los poderes católicos que atraparán a los santos, para que se cumplan las palabras profetizadas en el Apocalipsis. La mayoría de Mi pueblo será atrapado y pisoteado, porque sus vidas no son limpias ante su SEÑOR. ¡Diles este mensaje! ¡No te quedes callado! Porque si callas, ¡te castigaré!

Las iglesias son fraudulentas (una imitación, falsas). Viven una vida como desean sus corazones, con sus manos manchadas en sangre, en adulterio, en sodomía, y adorando a dioses extraños y extranjeros. Porque han abandonado al Dios verdadero, Él les ha permitido seguir como sus corazones deseaban. ¡Ahora, diles! ¡Clama a gritos! Diles que dejen de andar por el camino que sus corazones deseaban, que se arrepientan con todos sus corazones, para que en el día de la ira de la Bestia, pueda salvarlos para que no me nieguen. El tiempo es muy corto, y el ejército de su salvación ya está preparado».

De nuevo, Él me habló: «Mira a tu derecha». Al mirar, vi un ejército tan vasto que mis ojos no podían abarcarlo. «Este es el ejército que he preparado para salvar a Mi pueblo de las garras de la Bestia. No olvides decirles las palabras que te he dicho. Te daré un espíritu de recordar». La voz continuó hablándome: «Vendré y te traeré más revelaciones sobre los tiempos del fin».

De nuevo, oí un trueno. Entonces, la nube blanca y el ser desaparecieron. Estaba tan aterrorizado que no pude dormir el resto de la noche.

Queda 1 Página

Dumitru Duduman

Comentario de Rafael: En esta profecía me llamó la atención, porque antes yo creía que tan pronto se llenara el Libro de los Gentiles con el último nombre, eso marcaría la Segunda Venida de nuestro Señor Jesucristo (Romanos 11:25; Lucas 21:24). Pero lo que Dumitru nos dice es que, cuando ya se haya llenado el Libro de los Gentiles, eso va a marcar el inicio de la destrucción de Babilonia y va a desatar todos los terrores de la Gran Tribulación. Así que todos los creyentes van a ser probados y refinados, para ver quien se mantiene vencedor hasta el final. Si en 1996 quedaba solo 1 página, acaso ¿Ya se habrá completado el Libro en estos casi 30 años?

“He aquí Yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de Mí. Y luego, repentinamente, vendrá a Su templo el Señor a quien buscan, el ángel del pacto a quien ustedes desean. ¡He aquí que viene!, ha dicho el SEÑOR de los Ejércitos. ¿Quién podrá resistir el día de Su venida? o ¿quién podrá mantenerse en pie cuando Él se manifieste? Porque Él es como fuego purificador y como lejía de lavanderos. Él se sentará para afinar y purificar la plata porque purificará a los hijos de Leví. Los afinará como a oro y como a plata, y ofrecerán al SEÑOR ofrenda en justicia”. — Malaquías 3:1-3 (RVA 2015)

Profecía de enero de 1996. La puede encontrar en este enlace.

Mientras viajaba en el auto de Kansas hacia Nebraska, vi a una estrella grande aparecer ante mí. Esta estrella apareció y desapareció frente a mis ojos 4 veces. Le conté a mi nieto lo que había visto, y él dijo: “Ora y observa lo que Dios te muestre”.

La noche siguiente, mientras estaba orando, vi a la estrella otra vez. Brillaba con tanta intensidad, que me enceguecía. Dos hombres caminaron fuera de esta estrella, vestidos con ropas brillantes. Uno me habló: «Dumitru, escucha y recuerda. Tu regreso a América era mi plan y mi decisión. Aún tengo nombres que añadir al libro antes de que sucedan todas las cosas que te he mostrado».

Abrieron un gran libro y dijeron: «¿Recuerdas cuántas páginas faltaban por llenar cuando te lo mostré la última vez? Ahora solo queda una página. Cuando ésta sea completada, lo que te he dicho le sucederá a América». El hombre procedió a decirme que, el tiempo que tomaría para llenar esta página, no sería más largo, sino más corto. Cerró el libro y resonaron sonidos de trueno.

Atemorizado por lo que había visto, seguí orando.

Los 3 Pergaminos

Klaus Schwab el calentamiento global

Comentario de Rafael: Estamos viendo cómo los desastres naturales se están incrementando en todo el mundo. Estos no son debido al Calentamiento Global, que es una mentira que se repite una y otra vez, como propaganda, para que aceptemos las leyes e impuestos de la bestia para controlar a la humanidad. El bióxido de carbono (CO2) no es un contaminante, no está relacionado con los cambios climáticos. El CO2 que exhalamos cuando respiramos es utilizado por las plantas. Si reducimos el CO2, tendremos menos cosechas, habrá más hambruna, y reducirlo a cero, significa acabar con toda la humanidad y los animales. ¿Puede ver el objetivo real de la propaganda del Calentamiento Global?

En esta profecía se muestra claramente que los desastres naturales son una llamada de atención de YAHWEH contra el pecado de los hombres. Las sequías que están acabando con las cosechas, los huracanes, tornados e inundaciones están destruyendo casas, infraestructura y causan fatalidades. Lamentablemente, solo cuando las personas están en problemas, es cuando recuerdan a Dios y es su oportunidad para regresar a Él.

“«Y además les retuve la lluvia cuando aún faltaban tres meses para la siega. Hice llover sobre una ciudad y sobre otra ciudad no hice llover; sobre una parte llovía, y la parte donde no llovía, se secó. Así que de dos o tres ciudades iban tambaleándose a otra ciudad para beber agua, y no se saciaban. Sin embargo, ustedes no se han vuelto a Mí», declara el SEÑOR. «Los herí con viento abrasador y con plagas; y la oruga ha devorado sus muchos huertos y viñedos, sus higueras y sus olivos. Sin embargo, ustedes no se han vuelto a Mí», declara el SEÑOR.

«Envié contra ustedes una plaga, como la plaga de Egipto, maté a espada a sus jóvenes, junto con sus caballos capturados, e hice subir hasta sus narices el hedor de su campamento. Sin embargo, ustedes no se han vuelto a Mí», declara el SEÑOR. «Los destruí como Dios destruyó a Sodoma y a Gomorra, y fueron como tizón arrebatado de la hoguera. Sin embargo, ustedes no se han vuelto a Mí», declara el SEÑOR”. — Amós 4:7-11 (NBLA)

Los terremotos que están aumentando exponencialmente, como en Japón, donde en las últimas 3 semanas se han registrado más de 2,000 temblores, algo totalmente fuera de lo común, porque en promedio tienen unos 1,500 temblores en todo un año. También se ha registrado mucha actividad volcánica y algunas erupciones.

Esta profecía nos dice que nuestra única esperanza para sobrevivir estos desastres naturales, es amar a YAHWEH obedeciendo Su Torá, trabajando para la salvación de otros y manteniendo nuestras vidas de una forma agradable a Dios.

Profecía del 1 de julio de 1994. La puede encontrar en este enlace.

Era pasada la medianoche. No podía dormir porque sentía en mi interior que Dios me iba a hablar, así que comencé a orar. Después de orar, me fui a acostar y me quedé dormido. Soñé que empecé a escuchar truenos y a ver relámpagos. La tierra empezó a moverse y a temblar violentamente. Grité a mi familia: “¡Despierten, porque algo está pasando afuera!». Cuando salí, había tanta oscuridad que no podía ver nada. Sin embargo, en esa gran oscuridad, podía escuchar las voces de niños, mujeres y hombres gritando. Les dije a mi familia que tuvieran cuidado de cómo caminaban”.

Desde las nubes que soltaron esta oscuridad sobre la tierra, oí una voz poderosa que decía: «Me estoy vengando contra el pecado. ¡Me estoy vengando para que puedan ver Mi poder! ¡Con tanto como los he bendecido, así es cuánto les enviaré destrucción! Enviaré tormentas, fuertes lluvias, inundaciones, terremotos, huracanes y tornados, porque quiero que vean Mi poder, y que sepan que sin Mí, ellos no pueden hacer nada. Confiaron en sí mismos y en sus propias fuerzas. Por eso es que castigaré este lugar».

La tierra se movía como si estuviera sobre agua. La gente vivía en un terror completo; cada uno gritando más fuerte que el otro, sin poder entender nada. La tierra se agitó tan violentamente, que no podía caminar. De repente, en medio de todo el tumulto, apareció una luz, ¡más poderosa que cualquiera que hubiera visto! En la luz brillante había dos hombres. Uno de ellos me dijo: «Vine a hablar contigo. Enviaré grandes plagas sobre América y quiero que estés enterado. Yo soy el que habló contigo en el pasado, y estoy hablando contigo ahora. Te dije lo que sucederá en este lugar. ¡Se precavido, porque el momento se acerca!».

Después de decir estas palabras, sacó un pergamino que empezó a desenrollarse muy rápidamente. Era tan largo, que no podía ver donde terminaba. En este primer pergamino de papel estaban escritos toda clase de nombres. Junto a cada nombre estaba indicado ya sea «castigar», algún tipo de enfermedad (de todo tipo estaban enlistadas), «prueba» o «tormento». Aquellos nombrados tendrán que pasar por lo que esté indicado junto a su nombre, para que sean limpiados y puedan permanecer de pie.

Entonces ese pergamino fue enrollado y sellado. Un segundo pergamino me fue mostrado. En él estaba escrito: «Paz, gozo en el Espíritu Santo, salvación o victoria para quienes me amaron y trabajaron para Mí, y mantuvieron su vida limpia. No para los hipócritas, los orgullosos, los jactanciosos, los odiosos…» (ni otros que no puedo recordar). El pergamino continuó pasando lentamente frente a mis ojos hasta que terminó de pasar.

Entonces fue abierto un tercer pergamino, que también tenía nombres escritos. Sin embargo, había algo escrito, solo junto a los nombres de la mitad superior. En mitad inferior, junto a cada nombre, había estrellas que brillaban de manera intermitente. Pregunté qué significaba esto. Uno de los hombres me dijo: «Estos son aquellos con quienes se completará el número. La semilla de Dios ha llegado a sus corazones, y ahora mismo está trabajando hacia el arrepentimiento. Cuando se complete el número total, comenzará toda la devastación. Hasta entonces, enviaré grandes plagas sobre América, para que se despierten del sueño con el cual están durmiendo, y de su dependencia en ellos mismos; para que puedan ver su orgullo y jactancia».

Entonces empezó a llover hielo y granizo. La gente se dispersaba por todas partes, sin saber a dónde ir. Por el terror de los gritos me desperté.

Este sueño fue tan real para mí, que salí directamente afuera para ver si no estaba sucediendo en ese momento.

El Salvador Regresa como Juez

Jesús Segunda Venida

Comentario de Rafael: Este periodo de la Gran Tribulación va a poner a prueba la fe de todo el mundo. Los incrédulos van a sacar a la luz toda su maldad, y se van a ir alejando más y más de la salvación del SEÑOR. Los cristianos carnales van a ser probados en su fe, y lamentablemente, muchos de ellos perderán su salvación, al buscar salvar esta vida adoptando la marca de la bestia (2 Pedro 2:20-22; Hebreos 10:26-29; Éxodo 32:33).

Por último, los cristianos espirituales crecerán su fe en Jesucristo e incrementarán su relación con Él, pese a todas las pruebas por las que pasarán. Serán refinados y purificados por los acontecimientos en el mundo (Malaquías 3:3; Santiago 1:3-4). Experimentarán los milagros, el poder y la salvación de YAHWEH aún en las peores condiciones de este mundo.

“«Y sucederá en toda la tierra», Declara el SEÑOR, «Que dos partes serán cortadas en ella, y perecerán; pero la tercera quedará en ella. Y meteré la tercera parte en el fuego, los refinaré como se refina la plata, y los probaré como se prueba el oro. Invocarán Mi nombre, y Yo les responderé; diré: “Ellos son Mi pueblo”, y ellos dirán: “El SEÑOR es mi Dios”»”. — Zacarías 13:8-9 (NBLA)

Profecía del 24 de enero de 1994. La puede encontrar en este enlace.

Eran las siete de la mañana cuando me desperté. Todavía me sentía un poco cansado, así que me quedé en la cama un rato más para descansar. Entonces me quedé dormido, y soñé que estaba en una iglesia americana [estadounidense] en un servicio, cuando el edificio empezó a moverse violentamente. Como no sabían qué estaba pasando, la gente en el interior estaba muy asustada y rápidamente empezaron a salir corriendo. Yo también logré salir, pero con cada paso que trataba de dar, parecía que me estaba hundiendo en el suelo. Empecé a ver a mi alrededor buscando algo para apoyarme para poder caminar. Oí una voz que dijo: «¡Voltea hacia arriba y mira a los cielos!».

Miré hacia arriba. Tan lejos como podía ver con mis ojos, todo el cielo estaba rojo sangre. Dije: “¡SEÑOR! ¿Qué significa esto? ¿Por qué el cielo está rojo?”. Entonces recordé a mi padre diciéndome que, antes de la gran guerra el cielo se había vuelto rojo sangre.

Mientras miraba al cielo, de repente apareció una nube. Tres hombres salieron de la nube. El de en medio estaba vestido en ropas brillantes y era de gran estatura. Brillaba con tanta intensidad que no podía mirarlo. Los otros dos, uno a su derecha y otro a su izquierda, estaban preparados para la guerra. Tenían armas en sus manos que estaban apuntando hacia los habitantes de la tierra. Temblando, pregunté: “SEÑOR, ¿qué estoy viendo? ¿Qué significa todo esto?”.

Cuando el de en medio habló con voz de trueno, todos los que estaban a mi alrededor pudieron verlo: «Yo Soy Jesucristo, quien di Mi vida por ustedes. Muchos de aquellos por quienes di Mi vida, hoy me deshonran, viviendo en pecado y en cosas que están mal. El honor y la gloria que merezco, no me son dados. Por esto, ya no tengo más misericordia. Pero pronto regresaré en gloria y honor como Juez, para juzgar a todos los habitantes de la tierra. Primero, juzgaré a aquellos que llevan el nombre de cristianos, pero que han tratado de engañarme. Por causa de ellos, Mi nombre fue, y es, deshonrado y blasfemado ante quienes no me conocen».

«Y en cuanto a ti», me dijo, «¡Mantente despierto! Debes estar en guardia más que nunca, porque pasarás por muchas pruebas. Ahora la batalla empezará a ponerse más dura. El diablo está listo para comenzar la guerra contra los cristianos, y Yo he permitido esto».

Entonces los dos hombres a su lado comenzaron a disparar sus armas. Llamaradas de fuego salieron simultáneamente, iluminando el cielo, y éste empezó a quemarse. El que brillaba mucho se paró en medio de las llamas, gritando a gran voz: «¡No teman! Todos los que me adoraron y que han vivido una vida limpia, los que sufrieron aquí en la tierra, tendrán alegría. Porque Yo soy quien juzgará a todas las naciones de la tierra. No libraré a nadie, ni tendré misericordia ni gracia para nadie. El día cuando castigaré y condenaré, se acerca.

Digo estas cosas para que todos escuchen. Días duros de sufrimiento vienen a este lugar y sobre toda la tierra. Las dificultades serán tan grandes, que las mentes de los hombres no podrán entenderlo. Será tan duro, que los hombres se suicidarán. Juzgaré a través del tormento, dolor y sufrimiento, y me vengaré con gran dureza por todo pecado. El Padre me ha permitido vengar Mi sangre derramada».

Los otros dos empezaron a disparar sus armas de nuevo, pero esta vez, salió una flama azul. Caí con mi cara al suelo. El de en medio gritó: «¡Levántate! Quiero mostrarte el juicio del pueblo y de los malvados. Pero el juicio más duro será recibido por la iglesia, porque conocían Mi palabra y Mi poder, pero muchos de ellos me deshonraron, cayendo en profanación, adulterios, maldad, y deshonraron Mi nombre ante hombres que no me conocían. Por esto, estoy lleno de ira, y se me ha dado la autoridad para vengarme contra los habitantes de la tierra, aquellos que me han deshonrado».

Los dos que estaban a Su lado, empezaron a disparar de nuevo. Un coro celestial apareció y empezó a cantar una canción en el más hermoso esplendor: «Jesús está vivo. Jesús vive. Jesús está vivo. Jesús reina. Jesús viene en gloria. Jesús ya no es Salvador, sino que regresa como Juez». Empecé a llorar. Lloré con lágrimas de alegría. Estaba en una atmósfera de increíble belleza.

El coro continuó cantando mientras los dos hombres con las armas se presentaban a sí mismos. El de la derecha dijo: «Soy la cabeza de los ejércitos del SEÑOR, Gabriel». El de la izquierda dijo: «Soy Miguel, el líder de los ejércitos del SEÑOR. Estamos a las órdenes del Cordero, y adondequiera que el Cordero va, nosotros lo acompañamos». El coro continuó cantando y todo empezó a desvanecerse. Desperté con las palabras: «Jesús ya no viene como Salvador, sino como Juez».

Comentario de Rafael: Esperamos que estas profecías les hayan servido para evaluar su situación espiritual actual, y para que se acerquen más que nunca a YAHWEH. Para que fortalezcan su fe en preparación a los eventos que están a punto de acontecer. Esto va a cambiar la forma en la que vivimos, y va a poner a prueba a los creyentes, que serán atacados por el enemigo para que pierdan su salvación. Mientras que el mundo experimenta guerras, tormentas, incendios, inundaciones, terremotos y otros desastres naturales o provocados por hombres. De usted depende, mantenerse vencedor hasta el final.

¡Que Dios los bendiga!


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